viernes, 30 de marzo de 2012

La bicicleta un día va a volar. La bicicleta de todos. Ya lo verán. Le están saliendo las alas. Son de verdad. El niño quiere que vuele, y volará. El niño irá por el aire a comprar el pan; dará una vuelta al campanario de paloma y de cal. El niño y la paloma sobre la ciudad. El niño acompañando al ganso blanco Eso se verá. Le están saliendo las alas. Ven a mirar. Mira como el lirio de los campos. No pienses mal. Las alas tienen miedo de algo. Salen y vuelven a entrar. Miedo de nosotros, quizás.
Tan pronto los hombres ganen la paz, la bicicleta de todos volará. La que duerme en la puerta de los cines volará. La del cartero volará. La de la reina Guillermina, volará.
La mía y -la tuya- volará. Por arriba del humo y los cables me verás. La bicicleta tendrá un solo nombre: Libertad. El ángel de las aguas ya no se irá. Calle ancha del cielo para mirar. Flores que nunca vimos aquí, allá. Habrá tiempo para mirar. Cuánto tiempo perdido, hay! Tan pronto los hombres dejen de guerrear, la bicicleta del mundo volará. Todos los pueblos tendrán un velódromo donde los niños correrán. De allí alzarán el vuelo. Darán una vuelta sobre el mar. Si no lo hubiera sobre el trigal; irán donde lo hayan y volverán. Ir y volver será como cantar. Porque la bicicleta tendrá alas de verdad. La del cartero, la de la reina Guillermina. Nadie se caerá. Todo es cuestión que los hombres ganen la paz. JOSÉ PEDRONI

lunes, 13 de febrero de 2012

domingo, 12 de febrero de 2012

Nessun dorma


Dilegua, o notte!
Tramontane, stelle!
Tramontane, stelle!
All’alba vincerò!
Vincerò! Vincerò!


¡Noche, disípate!
¡Estrellas, ocultaos!
¡Estrellas, ocultaos!
¡Al alba venceré!
¡Venceré, venceré!


He traído hoy este enlace al blog, a raíz de la muerte del tenor italiano. Poco sé de opera, pero me estoy recordando de una amiga de Modena que en aquel soggiorno italiano 93-96, nos introdujo a dos grandes riquezas de su tierra: il aceto (vinagre balsamico) y el festival de Modena de Pavaroti. Las dos cosas nos las hizo probar. La primera como aderezo para la ensalada, esta buenísimo y el festival “Pavarotti & Friends” que se realizaba en su terruño, y que a muchos nos atrapo por esos “duos imposibles” de lirica y pop, pero que la solidaridad (el dinero se destinaba a la emergencia de guerras o catástrofes) y la amistad lo hicieron posible.

Recomiendo escuchar en concreto esta canción “Nessun Dorma”, hay muchas versiones pero me quedo con la que canto en Turín en el 2006 y que podemos ver y escuchar en youtube. También podemos encontrar a Pavaroti con Bono o con Zucchero cantando Cosi Celeste Miserere. Si alguien quiere ampliar conocimiento basta con seguir a golpe de Click y saber que es una parte de la opera Turandot, de G.Puccini y, click, click...

Y con la banda sonora de Nessun Dorma y sus sublimes palabras, que nos gustaría se hicieran presentes al final de nuestras luchas, nuestras batallas, nuestras vidas; un abrazo ¡y que nadie se duerma!!

martes, 9 de agosto de 2011

Creer


Cree lo suficiente en lo que haces, como para que no te importe lo que piensen los demás. Mt.